No me lo pude callar y hubo algunos que se echaron las manos a la cabeza. Le dije, quizá con poca cortesía, al director del Congreso Nacional de Periodismo Digital de Huesca que no había cumplido su promesa de que la Asociación de Periodistas Digitales de Andalucía organizase por fin una mesa en uno de sus "norteños" congresos. Pero la verdad es que, visto lo visto desde Guadix (Granada), ya no nos hacen falta esas migajas. Tenemos un grandioso congreso donde debatir con pluralidad nacional -lo digo a voces a ver si alguien allí en el norte me escucha- . Un congreso que ahora concluye con éxito para envidia de algunos allá por Aragón. Las conclusiones del Congreso son las que siguen.
Han sido unas jornadas intensas, con más de 150 participantes a los que se han sumado todos los que nos han seguido a través de la Red, marcadas por la calidad de los contenidos propuestos y por el debate suscitado en todas las actividades. Dicho esto, vamos a extraer en unas pocas líneas las principales conclusiones de nuestro Congreso.
De la intervención de Gustavo Sierra, el encargado de la conferencia inaugural nos gustaría destacar su tremenda calidad humana y profesional, resaltando que es un ejemplo claro de como un periodista veterano ha sabido reciclar sus conocimientos y hacer llegar sus mensajes con formatos actuales, de vanguardia y que nos sirven de referencia a todos.
También quedó claro ayer en la primera jornada, que la Red está cambiando, porque como contaba Juan Varela, ?están cambiando las personas, están cambiando los contenidos y están cambiando las cosas?. Internet se mueve, se abre a nuevos formatos, cada vez más consolidados, y conceptos como blogs, podcasts, vídeo en la Red o periodismo ciudadano están marcando las pautas del mercado de la información. Pero también ha quedado claro que quizá mañana pueden ser otros los formatos que se impongan, otras las tendencias que abran el camino.
Toda esta innovación de los medios no está exenta de problemas que afectan a la profesión periodística desde hace años. La situación que encuentran los recién licenciados en el mercado de trabajo no es halagüeña: precariedad laboral, acusaciones de falta de rigor, la presión de tener que trabajar con más formatos, con más celeridad... Todos estos problemas se acrecientan en un sector tan incipiente y joven como el digital. En cuento a la publicidad, la principal fuente de financiación de los medios, las perspectivas de futuro parecen ser muy buenas ya que las empresas están viendo en Internet un canal imprescindible para llegar a un consumidor cada vez más segmentado.
Ha quedado claro que el periodismo está ante una encrucijada, soplan vientos de cambio y las empresas periodísticas dudan sobre qué camino tomar. Todos los participantes en este congreso no hablan ya de problemas futuros, sino de retos presentes que debemos asumir. El sector empresarial representado en este Congreso por compañías de la talla de Google, Microsoft, Lenovo, Axesor o de la propia patronal andaluza de empresas tecnológicas han coincidido en la importancia de los medios digitales a la hora de hacer llegar sus innovaciones al usuario. Del mismo modo, han apuntado que la instantaneidad del medio digital pone en peligro a menudo el rigor que debe marcar las pautas de la profesión periodística.
Hemos podido visualizar ejemplos de herramientas que facilitan nuestra labor y en cuyo diseño y desarrollo han estado directamente implicados periodistas. Eso hace unos años era algo impensable. Y si los periodistas y las empresas estamos reaccionando ante los nuevos tiempos, los políticos no podían ser menos. Nos gustaría resaltar que han participado en este foro, representantes de todas las instancias políticas: Ayuntamiento, Administración regional, Gobierno central, poniendo de manifiesto el interés de la clase política española por este nuevo medio de comunicación que les acerca al ciudadano de una forma desconocida hasta ahora.
Tenemos Congreso para muchos años. Pedirán venir de Huesca y cuando lo pidan lo someteremos a votación, aunque no auguro nada bueno.
