, ESPACIO FINAL DEL PROGRAMA "ENREDADOS"Buenas tardes Jota. Mira si pinta bien el EBE de Sevilla que la omnipresente y siempre muy ocupada presidenta de Microsoft en España, Rosa García, se ha apresurado, antes de que se celebre, a inaugurar su Blog. Se llama “El Ventanal” y lógicamente está alojada en uno de los espacios de live. Com o “live.com”, como diríamos algunos que castellanizamos lo leído. Se siente abrumada con cien comentarios a su primer post. Pobrecilla, qué lástima da.
La García estará frotándose las manos viendo cómo a su máximo competidor le salen los primeros conflictos entre el Leopard y las aplicaciones de ilife. Que no se frote tanto las manos, a ver si hay que recordarle los cientos de parches que lleva Vista desde que nació.
Pero quiero aprovechar este foro creciente de oyentes para contar Jota una conversación con un ingeniero de redes de Sevilla que dedica su tiempo a ejecutar proyectos a empresas y –atención- a formar a jóvenes desempleados en técnicas ‘hacker’. Si, si, técnicas hacker, de piratas informáticos. Si, si, eso se enseña con dinero público.
Eso sí, antes de empezar, los chavales firman un acuerdo de confidencialidad para que no usen con otros fines lo que allí aprendan. Y aprenden de lo lindo con el programa Caín, por ejemplo. Un nombre sobradamente bien puesto.
Con un portátil a distancia de detección wifi de una empresa, en pocos segundos es capaz de visualizar las contraseñas que llevan hasta cinco niveles de seguridad. Es la protección de los bancos. Las empresas, en el mejor de los casos, no llegan a los dos niveles. Nosotros, Jota, en casa estamos buscando todavía el nivel.
¡Que lo he visto yo con mis propios ojos, Jota, que es cierto! Lo sabíamos, lo sabía, pero nunca lo había visto y me ha sorprendido. Pero lo delictivo viene ahora. Resulta que hay expertos en redes que en una práctica similar revientan las contraseñas y se hacen con los contenidos sensibles y críticos de empresas que, casualmente, reciben pocos días después la visita de un comercial ofreciendo asesoramiento informático. Ahí les aseguran poderles rescatar toda la información por una módica cantidad nunca inferior a 30.000 euros. Unos chorizos. Sabíamos que las empresas de antivirus fabrican sus propios virus para crear la necesidad, pero lo veíamos tan lejos… Ea, pues ya lo tenemos aquí, en Andalucía y creciendo.
Por cierto, que mientras los Duques de Lugo se separan, los de El Jueves le regalan al Rey los 3000 euros por las molestias, para que le sepa menos amargo el trago.
Y mientras tanto, Jota, seguimos sin avanzar en banda ancha. Septiembre se cierra con más de 7 millones y medio de líneas, un 15% por ciento menos, con respecto al mismo periodo de 2006. Un desastre.
Y, por último, para darnos de cabezazos contra la pared, Telefónica, la empresa que ha batido récords de beneficios en los últimos meses –ganó 7.848 millones de euros, como si supiéramos cuánto es eso- tiene la desfachatez y avaricia de subir hasta un 42,20% las llamadas de fijo a móvil.
Ay Jota, cuánto chorizo que meter en parrilla y a cuántos habrá que decirles que no nos da la REAL gana
La semana que viene si nos dejan, seguiremos enredando. Adiós.
